Campanas

CAMPANAS
¿Por qué se callan las campanas?
Sin ellas, el silencio vegetal
de este amanecer festivo
es sólo el gris paréntesis,
un recodo sin horas donde se abandonan
los trozos más brillantes de la noche.

Pronto despertarán las máquinas
que sobornan el aire
a dos mil decibelios por minuto,
aquellas que prometen llegar al caos en cabeza,
a pesar de las curvas de la vida.

Pronto comenzará el baile de máscaras
con perros destrozando
la fragancia del parque silencioso,
con niños que no son ya como éramos,
porque no van cogidos de la mano
y juegan lo inaudito.

No, no digo que todo lo pasado
haya sido mejor,
ni más fácil cuando este mundo era lugar
del  hombre, si alguna vez lo fue.

Para que el porvenir
sea más bello que el presente, sólo pido
campanas en domingo.